La familia Boeing Business Jet (simplificada como BBJ) son varios modelos de aviones comerciales de Boeing acondicionados al mercado de la aviación ya se corporativa como privada, en un principio basados en la serie 737.
Estos aviones por lo general poseen asientos para entre 25 y 50 pasajeros dentro de una distribución de lujo. Pueden contener un dormitorio principal, un baño con ducha, un área de conferencias/comedor, y una zona de estar. La división Boeing Business Jet, que se dedica a acomodar estos aviones, es un consorcio cuya propiedad se promedia a la mitad entre las compañías Boeing Commercial Airplanes y General Electric.
Boeing acomoda todos sus modelos bajo pedido, aunque los más cotizados son los de tamaño chico como el 737. La transcendental crítica de estas transformaciones es que los modelos pequeños de Boeing son muy lentos, en comparación con los modelos ejecutivos, como por ejemplo: Falcon, Bombardier, Cessna, Gulfstream, etc.
Otra de sus desventajas es el de no contener de posibles interiores diferentes, ni más tanques complementarios de combustible. La transcendental ventaja de este avión es que permite, en la configuración ejecutiva de 55 asientos, llevar a ejecutivos sin problemas de tiempo a cualquier aeropuerto del mundo. A estas personas, viajando en primera clase en una línea aérea regular, les costaría muchísimo más que arrendar uno de estos aviones, y en momentos, poseerlo.
Otras primacías de estos aviones, son su tamaño, autonomía, y mayor suma de personal con horas de vuelo en una aeronave similar, el 737.